Cuento de terror: La llamada de auxilio
En esta historia de horror, un oficial finalizando su turno, es enviado a verificar una llamada de emergencias a un restaurante.
En esta historia de horror, un oficial finalizando su turno, es enviado a verificar una llamada de emergencias a un restaurante.
Un policía se encontraba conduciendo su patrulla, cuando fue alertado por un llamado de emergencia acerca de un disturbio en un restaurante cercano, donde una mujer realizó un pedido de auxilio.
Su turno ya casi acababa y deseaba ir a ver a su familia, pero el deber lo llamaba y tenía que acudir. Al llegar al restaurante y estacionar su patrulla, bajó del auto con su linterna, todo estaba muy oscuro, pero logró ver a una mujer mal herida sentada afuera del lugar, aparentaba estar sangrando, ya que toda su ropa tenía manchas de sangre y, supuso que fue la persona que hizo la llamada.
-Como se siente esta bien?…llamaré una ambulancia, dígame que sucede aquí.
Le preguntó a la mujer, mientras alumbraba dentro del restaurante y la luz que proyectaba su linterna, reflejaba solo cuerpos tirados por todas partes que, aparentemente pertenecía a algunas de las personas que allí cenaban, la mujer, que estaba en estado de shock, sacó fuerzas para intentar explicarle al policía lo sucedido.
-Fue algo de lo mas extraño y espeluznante, todos no encontrábamos cenando, cuando de pronto una mujer que estaba en una mesa junto con un hombre, se levantó, y comenzó a decir palabras que nadie entendía, el hombre intentó sentarla y calmarla, porque cada vez se alteraba mas, pero era inútil, las personas se incomodaban por aquel espectáculo, pero lo peor fue cuando aquella mujer, tal vez en un estado fuera de sí, empezó a vomitar a todos, sus ojos y rostro cambiaron, y…y…le juro que lo que le diré no es mentira…esa mujer se elevó al menos un pié del suelo, girando sus piernas hacia atrás de forma antinatural.
El policía tenía cara de incredulidad, pensó que solo se trataba quizás del estado de impresión que tenia la mujer, pero siguió escuchándola y anotando en su libreta, mientras esperaba refuerzos y la ambulancia.
-Y…que pasó con toda esta gente, como es que solo usted está viva?
-Yo logré salir a tiempo, aquella mujer asesinó al hombre que la acompañaba, pero no se detuvo allí, todos gritábamos y corríamos por todas partes, sin embargo las puertas estaban cerradas, era imposible salir, fue como si algo detuviera las puertas para no dejarnos escapar, varias personas intentaron detenerla, pero su fuerza era mayor, inhumana, nadie pudo hacer nada y a todos los asesinó, mientras nos atacaba solo gritaba cosas como: «Saldré y poseeré a todos, todos morirán».
-Pero aun no me dice como logró escapar usted…
-Yo…yo…no se como lo hice, pero en un descuido le corté el cuello a la mujer, ella cayó al suelo, aun debe estar allí en el piso, si es que era humana.
El policía impresionado por el relato, dejó a la mujer sentada afuera con la cabeza agachada descansando y se adentró a revisar el lugar y buscar el cadáver de esta persona y ver si alguien mas pudiera estar vivo, aunque por el escenario no parecía posible.
Al entrar, el lugar estaba frío, no era el clima natural, sino que había un vapor frío, el suelo estaba lleno de cadáveres, efectivamente nadie estaba vivo, los muertos tenía el rostro retorcido, incluso sus extremidades estaban fuera de lugar, era una imagen dantesca, pero no había sangre, todos habían muerto de una extraña forma, pero nada de sangre, el policía luchaba por mantener el valor alli dentro, y entre tantas personas por todos lados, algo llamó su atención, el cadáver de una mujer con el rostro también retorcido y su quijada destrozada.
El oficial se agachó lentamente a revisarla, esta mujer curiosamente tenía en una mano un teléfono celular, y en la otra un cuchillo bañado en sangre, el oficial tomó el celular y vio que el último número marcado, era el 911, su instinto rápidamente se activó, esta era la mujer que hizo la llamada de auxilio, pero…y el cuchillo lleno de sangre?.
El policía salió muy confundido, necesitaba hablar nuevamente con la mujer que estaba afuera, al salir, la mujer estaba en silencio con la cabeza aun baja.
-Oiga, esta bien?…hay algo que no entiendo, porque usted esta toda manchada de sangre?…nadie allá adentro a muerto de ninguna herida, hay una mujer con un cuchillo ensangrentado en la mano, se que esa mujer fue la que llamó al 911, pero…si ella llamó entonces quien es usted?
No obtenía respuesta alguna, la mujer no levantaba la cabeza, entonces el oficial colocó su mano sobre el hombro de la mujer y la movió para ver si no estaba desmayada y…
-Por Dios!!…
La cabeza de la mujer cayó al suelo debido a una profunda herida ocasionada por un cuchillo, el mismo que sostenía la mujer muerta dentro del restaurante. El oficial entró en pánico, cayó al suelo y rodaba su cuerpo alejándose de esa mujer, la cual de la forma mas aterradora posible, aun sin tener su cabeza en su lugar, incorporó su cuerpo, levantó la cabeza con sus manos y la mantuvo a la altura de la cintura, mirando fijamente al oficial, sin decir ninguna palabra, solo una mirada de maldad y una leve sonrisa.
-Que…que es usted!
El policía estaba tan asustado que no podía mover un dedo, la mujer se giró y se fue caminando para perderse en la oscuridad de la noche. Luego de unos minutos, llegó por fin el apoyo junto con las ambulancias, al ser preguntado por lo ocurrido, el oficial tenía la mirada perdida y no era capaz de explicar nada, el caso nunca fue resuelto y aquella mujer jamás fue vista otra vez.